La medicina funcional es un enfoque médico centrado en tratar la causa subyacente de las enfermedades, en lugar de solo abordar los síntomas. Se enfoca en comprender la individualidad de cada paciente y examina cómo factores como la genética, el estilo de vida, el ambiente y la nutrición influyen en la salud. Este enfoque personalizado busca restaurar el equilibrio y optimizar el bienestar general.
BENEFICIOS
- Enfoque personalizado: Aborda las necesidades individuales de cada paciente, identificando las causas fundamentales de las afecciones.
- Prevención: Promueve un estilo de vida saludable y una dieta adecuada para prevenir enfermedades crónicas y mejorar la calidad de vida.
- Tratamiento holístico: Combina tratamientos convencionales con terapias alternativas, como cambios en la dieta, ejercicio y manejo del estrés, para restaurar el equilibrio del cuerpo.
- Mejora del bienestar general: Ayuda a restaurar la energía, mejorar el sistema inmunológico, regular el metabolismo y equilibrar las hormonas.
Quién lo realiza
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La medicina funcional la practican médicos especializados en este enfoque, a menudo médicos integrativos o de atención primaria que tienen formación adicional en medicina funcional. Pueden ser médicos generales, internistas o especialistas que combinan su conocimiento convencional con métodos alternativos para tratar de manera integral a los pacientes.
Duración Procedimiento
- Las consultas de medicina funcional suelen ser más largas que las consultas médicas convencionales, con sesiones iniciales que pueden durar entre 60 a 90 minutos, debido a la necesidad de una evaluación exhaustiva del historial médico, estilo de vida, dieta y factores emocionales. Las consultas de seguimiento generalmente duran entre 30 a 60 minutos, según el plan de tratamiento individualizado.
Sesiones Requeridas
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Según la necesidad del paciente.